El desapego es otra de esas palabras que producen impacto, de las que queremos oír poco y nada, y creo, una vez más, que el ―error‖ está nuevamente ligado a esa concepción de dolor. Si nos detenemos a pensar dos segundos... ¡la pucha que somos jodidos! Pareciera ser que disfrutamos del sufrimiento, ¡joder! Pensemos dos segundos más, ¿Por qué aferrarse a algo que no funciona? O a alguien que físicamente o no, ¡ya no está! La respuesta es sencilla, vivir envuelto en la nostalgia, en el recuerdo, en el pasado, en el hubiera e incluso en un futuro que jamás vendrá, mantiene al sujeto atrapado en esa densa burbuja (que más que burbuja sería una jaula) que le impide ser, más allá de un otro, más allá de todo. Una buena excusa para no estar en el presente, no disfrutar, acumular deseos reprimidos como medallas de oro en la pared y sobretodo una buena excusa para no soltar el control.
Desapego no significa carencia o pérdida, significa algo muy simple: Es un préstamo que vence cuando uno decide irse o cuando algo se termina. Nada dura para siempre. Y es así, esta es la señal que nos marca que las pérdidas deben transitarse, obligatoriamente, desde la tristeza,
desde la lágrima, y desde el encuentro con uno mismo, entendiendo que lo que se fue da lugar a lo que viene.
“Desapego es soltar lo viejo, aun cuando lo nuevo aún no ha llegado.”
Sri Nisargadatta Maharaj
Nos hemos criado rodeados de fantasías, de falsos esfuerzos, para conservar la ―unión familiar, porque el matrimonio es ―para siempre porque el casamiento también lo es, porque la iglesia, porque mis padres han estado toda una vida juntos, porque somos el uno para el otro y ¡quién sabe cuánta ridiculez más!
Entonces, es así como terminas viviendo con un marido que más que marido parece un hijo, un amigo o compañero de piso o viceversa, se entendió. Una persona con la que convivís, con la que quizás tengas hijos o no, de la cual probablemente te vivas quejando y esperando que cambie y con quien tal vez tenés sexo de vez en cuando y más o menos, pero a la cual por alguna razón, te aferras y no dejas ir.
“no es más valiente quien más soporta, sino quién se atreve a dar el paso... y dejar ir”
Será fundamental entonces, transformar los pensamientos ligados al dolor y al sufrimiento para aprender a aceptar, asumir y abrazar las pérdidas para así poder avanzar. De esta manera, el desapego pierde el peso absoluto de la frustración para convertirse en una herramienta cercana al encuentro con uno mismo y por ende a la plena libertad.
Para que esto suceda, es necesario ser conscientes de nuestra realidad, de lo que nos rodea, de cómo nos sentimos, de quitarse la venda de los ojos y aceptar que nada de lo que está a mi alrededor me hace sentir plena/o, esta dosis de realidad permite mirarnos desde afuera, hacia adentro para comenzar a reparar, establecer sanos y necesarios límites para con nosotros mismos y con los demás, y dejame decirte algo: este es el gesto más amoroso que podes hacer por vos mismo/a y para el otro. De aquí en adelante te sentirás como un pájaro que recién aprende a volar y que mientras más alto vuela, acompaña a los demás a encontrar su propio vuelo.
En este vuelo metafórico y real es donde uno comienza a sentir que las cosas se empiezan a encaminar y, sobre todo, a equilibrar.
Te obsequio este capítulo completo de mi nuevo libro: Ser o no Ser, ¿ésa es TÚ cuestión?
Elegí este tema porque siento que de muchísimas maneras, nos involucra a todos. A unos por las personas, a otros por la ropa, a otras por los recuerdos o los duelos no transitados, y así podría seguir.
Mi libro se consigue en mi sitio web, accedé acá para tener el tuyo.
Espero que tengas un día tranquilo de alma, sea lo que sea que hagas hoy.
Danny.
Gracias por regalarnos tan profundo capitulo de tu libro,siempre tan acertado ,transitando el desapego,pero todavia a medias tintas,que tengas un Domingo igualmente tranquilo ,Abrazo desde el Alma
Esa sincronicidad!! Hoy me desperté y este tema fue lo primero que se me cruzó por la cabeza... Estoy en pleno proceso de desapego y a medida que voy sintiendo ese duelo voy registrando a la vez la sensación de rechazo y abandono... Ahí es donde todo comienza y también sé de quien viene. Escucharte y leerte me ayuda mucho a reflexionar sobre mi historia de vida. Gracias inmediatamente gracias!!